“El corazón de Don Bosco”
En el nombre del Padre…
1. Escucho:
¿Cómo era el corazón de Don Bosco? ¿Durante esta semana seremos capaces de responder a esta pregunta?. ¡Estad atentos y aprended a escuchar con el corazón sus palabras!. Estos días iremos descubriendo juntos cómo Don Bosco puso su corazón al servicio de la juventud.
¿Quieres saber más cosas sobre él? Pincha aquí.
Ahora os invitamos a escucharle, ¡dejemos que él mismo nos cuente qué eran los jóvenes para él!:
Después de un viaje a Francia, Don Bosco, que sabía hablar al corazón de cada muchacho, les contó cuánto les había echado de menos:
“Ya llevamos mucho tiempo sin vernos. En el evangelio, leemos: «Donde está tu tesoro allí está tu corazón». Así que, cuando yo estaba en Niza o en Marsella, creedme que siempre estaba pensando en mis queridos jóvenes del Oratorio. Y es que vosotros sois mis inolvidables amigos. Y os digo que se está muy bien en la casa de los señores, en donde no falta nada, pero allí no os tengo a vosotros»
Nada le interesó más a Don Bosco que ver a sus jóvenes felices en el tiempo y en la eternidad, es decir, siempre. Así nos lo dice él mismo:
“Queridos jóvenes os amo con todo el corazón y me basta con que seáis jóvenes para que os ame extraordinariamente.
2. Reflexiono y comparto:
(El tutor invita a los alumnos a reflexionar sobre lo leído a través de las siguientes preguntas. Asimismo, puede fomentar un diálogo posterior para ayudar a los alumnos a verbalizar lo que sienten).
Si hubiese tiempo, también se puede escuchar la canción titulada Corazón Salesiano pinchando aquí.
Para Don Bosco los jóvenes eran los que hacían latir su corazón
¿Cómo era el corazón de Don Bosco?
¿Grande o Pequeño? ¿Abierto o cerrado?
¿Qué mueve a tu corazón?
¿Eres capaz de dejar a un lado tus cosas y tus comodidades para ayudar al otro?
2. Rezo:
Te damos gracias, Señor, por San Juan Bosco.
Él supo hacer sentir el abrazo de Dios a todos los jóvenes que encontró, ofreciéndoles esperanza, casa y futuro.
Tú le diste un corazón lleno de amor, en el que millares de hombres y mujeres han podido descubrir que eres tú, Dios del amor, el que estás presente como origen, fuente y meta de todo.
Señor, que nuestro corazón siga latiendo como el suyo frente a cualquier necesidad de nuestro entorno y que, como dijo Don Bosco, “Caminemos con los pies en el suelo, pero teniendo la mirada y el corazón en el cielo”
María Auxiliadora de los cristianos…
No hay comentarios:
Publicar un comentario